AQUERAS MONTAÑAS
Llena del Bozo (2566 m)
Sábado, 11 de julio de 2020
“Cuando la montaña os llega al corazón, todo viene de ella y os lleva a
ella.”. Una más que acertada frase de Franz
Schrader, un alpinista francés, que vivió a caballo entre los siglos XIX y XX,
y que amaba las montañas pirenaicas, contribuyendo a su cartografía debido a su
formación de geógrafo y cartógrafo. Y al margen del autor de la misma, hemos de
decir que la compartimos plenamente, porque el vínculo que se establece entre el
corazón de las montañas y el de uno mismo es inexplicable. Todo viene de ellas.
Todo nos lleva a ellas. Es algo obsesivo, rayando lo enfermizo. Bendita
enfermedad, que lleva aparejada la cura.
|
Rayando el alba por los gigantes del circo de Aísa |
|
Entrando el sol por los mundos Lecherines y Rigüelo |
Hoy hemos vuelto al hospital, a
la fuente de esa cura para tratarnos la enfermedad. Hoy hemos vuelto a las
montañas. En concreto al valle de Aísa,
al circo de Igüer, a ascender y
rodear la Llena del Bozo, la más
occidental de la sierra del Aspe. Y
la hemos encontrado un poco despistada, medio dormida, mecida entre nieblas,
que pronto se han disipado, concentrándose en el fondo de los valles. De Aísa
parte una pista asfaltada que recorre el valle, llegando hasta un paraje que se
da en llamar la Cleta, donde se
dejan los vehículos justo antes de una puerta metálica que impide el paso del numeroso
ganado que hay en la zona.
|
Arranque en la Cleta |
EL GRAN CIRCO DE AÍSA Y EL MUNDO LLENAS
|
Comienzo y fin de la circular |
Durante el recorrido carretero ya
se va abriendo a la vista esa gran sierra del Aspe que cierra el circo de Aísa.
Un amplio espacio bicéfalo, por un lado, al oeste el barranco de Igüer, y al este el de Rigüelo, cuna del río Estarrún,
al que se le añade el primero. Entre ambos el mallo Peñarruaba, por cuya
larga y ancha loma discurre el frecuentado sendero de subida al Aspe, y que
tomamos una vez nos hacemos partícipes de este bello lugar, con las aguas
serpenteando y arrojándose por las cascadas.
|
Del mucho ganado de la zona |
|
Dejamos atrás las nieblas por el valle de Aísa |
Cruzamos, pues, el barranco y
emprendemos la subida por esa loma, indicada como SL-HU 105, que da un buen paseo por el circo, y que abandonamos al
cruzarnos con el GR 11.1, que lo
cruza desde el collado del Bozo, al
oeste, y el de Rigüelo, o Magdalena,
al este. Como tres cuartos de hora hasta aquí, durante los que se va admirando igual lo
que tenemos enfrente como lo de nuestra derecha, los mundos Rigüelo y Lecherines. Dejamos ambas rutas y seguimos de
frente para, a los veinte minutos toparnos con un abrevadero, y seguidamente
una gran piedra, punto de inflexión de nuestro camino, puesto que dejamos el
que llevamos que suba al Aspe, y nos incorporamos a otro a la izquierda, mucho menos
evidente, que nos va llevando al mundo Llenas.
|
Transitando por el mundo Llenas |
EL ASCENSO
|
Valle colgado previo a la Brecha Wallon, al fondo |
Se va ascendiendo por sendero no
siempre visible, y que va dejando atrás los enormes paredones de la Llena de la Garganta, para
introducirnos en un sorprendente circo pétreo bicolor, donde se maridan el
blanco de las calizas con el royo de las areniscas. Se alcanzan las rocas de
los contrafuertes de la Llena del Bozo, donde se puede seguir subiendo por la
incómoda pedriza o hacerlo por la chimenea, que no tiene dificultad, solo
prestar bien atención a los agarres. Superada la misma aparecemos en un pequeño
valle colgado, que nos encontramos con un buen corro de nieve dura. Lo recorremos hasta el circo para subir al collado,
llamado Brecha de Wallon, y que
ofrece unas extraordinarias vistas sobre el valle de Esper, al norte, en primer término.
|
Unas buenas vistas desde la Brecha Wallon |
|
Los vecinos Aspe y Llena de la Garganta |
Continuamos por el sendero dirección
NW, hasta arrimarnos ya a la pared, para acometer su ascenso a través de una
debilidad, por la que hay que emplear nuevamente las manos. Es una roca de muy
buena adherencia, pero hay que tener cuidado con las piedras sueltas. Se deja a
la izquierda un pequeño collado entre nuestra cima y tras cotas menores al sur, que se
van quedando atrás. Solo resta ya la última cuesta para auparnos a la cima de
la Llena del Bozo, desde la que se tiene una muy amplia perspectiva sobre el
entorno, y donde coincidimos con Alfonso y Jesús, mayencos ellos.
|
Vista hacia el oeste, presidida por el Bisaurín |
EL LARGO DESCENSO
|
La zona francesa invadida de nieblas |
El valle de Aspe francés duerme bajo un buen mando de nieblas, al
igual que alguno por los que hemos transitado para llegar, y que nos ha hecho
dudar de su comportamiento, pero al final ha sido bueno. Tras el habitual disfrute
de cumbre, nos planteamos el descenso hacia el barranco de Igüer por la loma norte. Con cuidado vamos sorteando
los tramos de piedra y los de hierba. Dejamos que los eventuales compañeros
sigan el descenso por la interminable pedrera, y nosotros lo hacemos fieles a
esta loma, que finalmente nos deja en el lecho del barranco, donde tras
cruzarlo nos incorporamos al GR 11
en su nuevo trazado como Sendero Turístico
de Aragón, y que alcanzamos en tres cuartos de hora. El recorrido por el
sendero se hace muy cómodo, y en cuarenta minutos más alcanzamos el collado del Bozo, al que llegan desde Lizara el GR 11 y el GR 11.1 cogidos de
la mano, siendo este último el que debemos seguir para ir descendiendo a la
zona de Izagra, con su ibón
colmatado y su dolmen, uno de tantos vestigios megalíticos de los Pirineos.
|
Barranco de Igüer |
|
Ibón colmatado de Izagra |
En media hora encontramos un
poste que nos señala la dirección de ese dolmen, que no nos resistimos a ir a
visitarlo. De vuelta al desvío, retomamos el GR 11.1 hasta dejarlo al toparnos
con el cruce del SL-HU 105, que ya no abandonamos. El sendero pronto se
convierte en pista, que seguimos bajando por este valle de Igüer hasta cerrar
la circular, primeramente, y en poco ya hasta la Cleta.
|
Dolmen de Izagra |
De este modo se concluye una
bonita circular por un bellísimo paraje, incluyendo la ascensión a uno de los
gigantes del lugar, la Llena del Bozo, habiendo recorrido 13,7 km, en poco más
de 7 horas de tiempo total, del que 4h 25’ han sido en movimiento, con 1175 m
de desnivel acumulado D+/-.
Hola Chema.
ResponderEliminarNo conozco el dolmen y el ibón de Izagra, así que me parece una buena idea este recorrido circular a la Llena del Bozo.
Hace tiempo que voy detrás de la corona del Aspe, he subido algunos de sus picos de forma individual pero este me falta.
Un saludo
Pues ánimo. Gracias.
EliminarPor cierto, el ibón de Izagra hace años que no lo conoce nadie, está colmatado.
Si, si, ya lo vi en la foto. 🙂
Eliminar