Capricornio
21.dic.12 11:12
19.ene.13 21:52
(hora solar)
Capricornio. Con él comienza el
invierno en el hemisferio norte, precisamente en el solsticio, cuyo significado
viene del latín, y es “sol quieto”. Ello es debido a que durante las primeras jornadas,
en las horas centrales del día, el sol no cambia su trayectoria. La órbita de
nuestro planeta con respecto al sol es elíptica, de modo que tiene un momento
de máximo acercamiento, llamado perihelio, y otro de máximo alejamiento,
llamado afelio. Pero no es tanto eso lo que influye sobre la temperatura, sino
la incidencia más o menos perpendicular de los rayos. En días próximos al
solsticio de invierno estamos en el perihelio, y el planeta tierra recibe los
rayos de forma más perpendicular en el hemisferio sur, por eso allí comienza el
verano y aquí el invierno.
Las
asociaciones mitológicas de Capricornio son dudosas, aunque hay una débil
referencia a Pan, cuya madre le abandonó a causa de su fealdad, pero que
contaba con éxito a la hora de seducir a las ninfas. Fue un antiguo dios
babilónico conocido como el “antílope del océano subterráneo”, el cabrito con
cola de pez, el carnero-pez.
Durante
este primer signo de invierno la nieve cubre buena parte del hemisferio boreal.
La superficie terrestre tiene una costra de tierra dura, helada, en la que el
aumento del volumen de agua en estado sólido aísla las capas más profundas del
subsuelo, impidiendo que prosiga la pérdida de temperatura al no escapar el
aire intersticial que ocupa el terreno. Merced a esto, la vida se concentra en
las raíces, y la producción de fitohormonas que almacenan su potencial
vitalógeno para meses de primavera alcanza sus niveles óptimos.
Capricornio
muestra el predominio de radiaciones de Saturno, Cronos, el Anciano de los Días,
y exhibe las partes leñosas de la vegetación, en las que parece que la vida ha
desaparecido. En los animales, Saturno está representado por los huesos. Así
como el leño es la parte que sostiene al vegetal pegado al terreno, los huesos
son los que sostienen a los animales superiores despegados del terreno. He ahí
una prueba más del distinto nivel de conciencia de unos seres y de otros. Pero
eso no quita para que en Capricornio, ciertos animales se mantengan inmersos en
la tierra, como dando un paso atrás con atavismo de reptil. Las viviendas
subterráneas son estrechas, obligándoles a reptar por ellas. La angosta
arquitectura de las madrigueras hace que pierdan poco calor y conserven el
vapor de agua del cuerpo, y al disminuir la combustión lo hace también el gasto
calórico.
En
el calendario de la Revolución Francesa, este mes se llama Nivoso, y es el
tiempo en el que la escasez permite hacer mayor aprecio de la supervivencia en
cada día, con la esperanza inconsciente de tiempos futuros, que no serán tan duros.
Es la Ley de la Naturaleza. Para el ser humano, asegurado en el calor de un
buen hogar, es ocasión de júbilo ese triunfo sobre el frío, sobre el manto
nivoso, sobre la muerte del año. Son los días más cortos del año, es tiempo de hogar, leña en la chimenea y sopas en el puchero.
Es
signo de tierra, y en el organismo corresponde con las rodillas, de modo que
nos vendrá bien cualquier ejercicio relacionado con ellas: flexiones, fricción
con nieve, marcha en cuclillas… En cuanto a la fisionomía, guarda relación con
las grutas, de hecho el hueco poplíteo es uno de los externos mayores del cuerpo. Con
grutas, decimos, con cavidades. Los nacidos bajo este signo son más proclives a
la soledad, al desánimo, es por ello que adquiere especial relieve la necesidad
de realizar actividades en grupo; la risoterapia será especialmente benéfica.
Sin embargo, su personalidad está representada por un búho en una noche de luna
llena, símbolo de sabiduría y de lucidez, de ensoñación y de agudeza de
ingenio, de valor moral, opinión acertada y protección natural contra los
peligros invisibles. Tienen por misión el sondear los Misterios de la
Naturaleza, y favorecer los beneficios que se derivan del buen empleo de la
cautela, la previsión y la meditación. A fin de que pueda cumplirla con
eficacia, hereda por nacimiento las siguientes predominantes:
Alma
meditabunda, introspectiva y comprensiva; carácter práctico, cauto y
concentrado; espíritu reverente devoto y melancólico; imaginación vivaz,
soñadora y creadora; juicio sereno, comedido y penetrante; temperamento
ambicioso, emociones profundas con afectos austeros. Ánimo de protección hacia
los suyos y, por contra, arrogancia contra lo que considera inferencias de
personas ajenas a sus asuntos. Al estar regido por Saturno, el planeta de la
obstrucción, han de hacer más esfuerzos para conservar el nivel vital.
Pero
como decimos siempre, no hay dos personas en el mundo, ni en la historia, que
hayan nacido al mismo tiempo y en el mismo lugar, luego las influencias
cósmicas, por poca diferencia que haya nunca son las mismas. Son rasgos
generales, tendencias, supeditados siempre al mayor o menor grado de evolución
espiritual de la persona. En este signo, el de la cabra, los astrólogos
distinguen siempre entre dos tipos. La cabra montés, ágil, que trepa
limpiamente de risco en risco, ascendiendo siempre montaña arriba en busca de
pastos más puros; y la cabra doméstica, que se ve recluida al pequeño trozo de
pasto al que tiene acceso dentro del rebaño. Por eso se habla de que el que está
bajo el prototipo montés es ambicioso, emprendedor, aspirará siempre a subir, conseguirá
llegar lejos socialmente. Sin embargo, el doméstico estará más atrapado en el
valle, y aunque también con ambición, desistirá pronto debido a las
dificultades derivadas de la brutal competencia. Si es sensato, se aclimatará
sin mayores problemas, pero será más triste su vida.
Tiene
especial relieve su sentido del humor, su sagacidad. Personas de pocas
palabras, pero de gran ingenio para el comentario preciso e irónico, excesivo
en ocasiones. De mente seria y racionalista, sus pautas de pensamiento son
constructivas y tiene gran habilidad para planificar en detalle. En el plano
afectivo no tiene excesiva facilidad para relacionarse con los demás,
especialmente en circunstancias íntimas, debido a su timidez. En cuanto al
mundo profesional, al ser signo de tierra, no es amigo de la inestabilidad,
necesita seguridad. La preocupación por el éxito de los hijos puede llegar a
ser excesiva, pero siempre tendrá recursos para animarles a ser más y mejores.
Los padres de hijos Capricornio deben velar siempre para que pasen de ser cabras
domésticas a monteses.
Así
son ell@s y así hay que quererl@s. Bien amig@s, muchas felicidades a l@s Capricornios,
y que este tránsito os sea propicio a tod@s vosotr@s.
Imágenes extraídas de diversas Web