El Camino de Santiago Francés
(Vía Tolosana) por Aragón
Reandando el Camino francés
Viernes, 8 de julio de 2016
Sábado, 9 de julio de 2016
Cada día tendrá un nuevo horizonte,
cada horizonte un nuevo campanario,
y un viejo hospicio, y un ventero amable,
y un refrigerio simple, y el descanso…
cada horizonte un nuevo campanario,
y un viejo hospicio, y un ventero amable,
y un refrigerio simple, y el descanso…
… Emergerá la luz de la mañana,
mudo clarín en toque de relámpago;
tú y yo, y el grupo, perezosamente,
nos pondremos en marcha. Por el campo
se extenderán los corzos al galope,
temblarán las alondras en los álamos,
y en multitud de idiomas
se poblará el amanecer de cantos.
mudo clarín en toque de relámpago;
tú y yo, y el grupo, perezosamente,
nos pondremos en marcha. Por el campo
se extenderán los corzos al galope,
temblarán las alondras en los álamos,
y en multitud de idiomas
se poblará el amanecer de cantos.
romanicoaragones.com |
Bellas estrofas de Francisco
Álvarez Hidalgo, que glosan el camino, el caminar y el caminante. Sujetos
pasivo y activo, sólo puestos en contacto a través de la acción, que los une. Una
acción que no cesa, que no ha cesado desde los últimos más de mil años, aunque
eso sí, con sus altibajos, no pasando ahora precisamente por los mejores
momentos este Camino de Santiago Francés, por la Vía Tolosana, que transita
por Aragón, y que lo hace por el puerto de Somport, en cuya vertiente
meridional se encuentran las ruinas del Hospital de Santa Cristina, fundado a
finales del siglo XI, recogido en el Liber
Sancti Iacobi, o Códice Calixtino. Escrito por el clérigo francés Aimeric Picaud, entrado ya el siglo XII, este
códice le atribuye el lema de Unum Tribus
Mundi, situándolo al mismo nivel que los del Gran San Bernardo, en los
Alpes, y el propio de Jerusalén. Esos peregrinos, que cruzaban hambrientos el
paso, cansados, helados, posiblemente heridos, eran cuidados gratuitamente en
el establecimiento durante tres días, según nos indica el maestro Antonio Gª
Omedes en su web http://www.romanicoaragones.com/0-Jacetania/441-StaCristina.htm,
de donde se ha capturado también la imagen, en la que se recrea el complejo, en
el que al faltar documentación que lo atestigüe, no se sabe con precisión, pero
se estima un paso de entre 200.000 y 500.000 peregrinos anuales.
El Peregrino, de JA Barrios |
Hoy en día, la
Asociación de Amigos del Camino de Santiago de Jaca calcula en torno a 1.000
los que pasan anualmente por este lugar y recalan en la antigua capital del
reino en esta primera etapa. Desde los albores de la peregrinación, se han ido
abriendo muchas rutas, todas ellas convergentes en Santiago de Compostela,
donde cuenta la tradición se encuentra la tumba del apóstol tras llegar hasta
allí, desde Tierra Santa, y pasando por Zaragoza, donde se le apareció la
Virgen del Pilar. Una simbiosis que aún hoy en día provoca cantidad de movimiento
religioso, cultural, lúdico y deportivo. Pero al margen de leyendas y
tradiciones, que han de ser sometidas a la conciencia individual humana, lo cierto es que
hoy en día el tránsito por el Camino es un motor de desarrollo por los lugares
que pasa.
El consejero a su llegada al Somport |
Se ha ido materializando el proyecto,
hasta el punto de que estos cuatro días, del viernes 8 al lunes 11, el propio
consejero y una quincena de personas de su departamento, gabinete, directores generales, etc, han venido al
territorio a hacer el Camino, a pisarlo, a saborearlo, a disfrutar de él, en
definitiva, y ver in situ su estado y el gran margen de mejora que
actualmente tiene. Los prolegómenos vienen servidos con la firma de un
protocolo previo a la confección de una directriz que busca la promoción del
Camino. Este documento preliminar, lleva la rúbrica de la Asociación de Amigos
del Camino de Santiago de Jaca, la Federación Aragonesa de Montañismo, Turismo
Aragón y el propio Departamento de Vertebración Territorial. Este acto se
realizó en Zaragoza tres días antes del comienzo del recorrido. Un recorrido
que tuvimos el placer de realizar acompañando a la comitiva en las dos primeras
jornadas.
Acto simbólico de entrega de folletos al Albergue Aísa |
Viernes, 8 de julio. Somport – Jaca. Los primeros latigazos del
calor estival zurcen con ansia estos valles pirenaicos por los que discurre
esta primera etapa del Camino. Ocho y media de la mañana en el Somport, como en
media Europa. Con el amigo Jesús, también de la FAM, a la espera de la
comitiva, que hoy va a estar bien acompañada por más de una treintena de
miembros de Os Andarines d’Aragón, que sobre las nueve ya están echando pie a
tierra de ese autobús que los ha traído desde Zaragoza. Chema, de protocolo del
Dpto., junto con Jesús de la FAM, ya están poniendo orden en el reparto de las camisetas conmemorativas y el
tríptico, editado al efecto. Las camisetas para los participantes, y parte de
los folletos para Perico, del Albergue Aísa.
Palabras de bienvenida del consejero |
Bienvenida del consejero, y
alguna instrucción de Ernesto Gómez, vicepresidente de la asociación, atención a
los medios, y pasados unos minutos de las 10 nos ponemos en marcha. Y lo
hacemos por el sendero habitual, que ha sido objeto de reciente limpieza y
acondicionamiento. Por algo se empieza. Tras pasar por las ruinas del Hospital
de Santa Cristina, dejamos de lado el trazado nuevo para continuar por el anterior,
que sólo cruza una vez la carretera. Caseta del Pastor, en Piedras Rojas;
sobrepasando el puente del Ruso, Rioseta se abre a nuestra vista por terreno de
viejos bunkers, bajando a Anglasé, donde pronto nos beneficiamos de la sombra a
la entrada de Canalroya, donde ya encontramos alguna señal del GR 11 como
Sendero Turístico, y que desde su comienzo en la muga con Navarra, en Zuriza,
hasta aquí se va a terminar de marcar por el nuevo trazado.
Al paso por las ruinas del Hospital de Santa Cristina |
Torreta de Fusileros |
Tras una breve parada en la
Oficina de Turismo de la localidad, para hacer esa entrega simbólica de folletos,
continuamos la marcha, atravesando el pueblo, hasta ese corto, pero incómodo
paso por el arcén en el nudo carretero de la boca sur del túnel. Una vez
sobrepasada la presa del embalse, unas empinadas escaleras nos sitúan ya a los
pies de las ruinas de otra torre defensiva, la Espelunga, que corrió distinta
suerte que la restaurada de Fusileros, que pronto dejamos atrás al otro lado de la carretera, metiéndonos ya de
lleno en el sendero, considerado por muchos como el tramo más agradable de todo
el Camino.
Comida en el Gastroespacio |
El barranco de Ip baja refrescante
y generoso. Nos incorporamos al camino que baja del embalse y pronto pasamos el
puente de arriba, entrando en el viejo Canfranc, o Canfranc Pueblo, o Canfranc
quemao, que de varias formas se le conoce. Una población milenaria que ha
tenido su protagonismo a lo largo de la historia, siendo todo un hito en el
Camino. Cementerio, puente de abajo y camino ya de Villanúa, con sus afamadas
grutas, unos sistemas subterráneos, sin terminar de explorar, en los intestinos
de esta enorme mole calcárea que es la Collarada. En la abierta al público, la
de las Güixas, nos esperaba Tito Terrén el alcalde de Villanúa, que nos
acompaña hasta el centro urbano, donde nos ofrece un refrigerio, y luego la
comida en ese nuevo punto de encuentro gastronómico que llaman el
Gastroespacio, bautizado con el nombre de nuestro político con más carisma de los últimos tiempos, José Antonio Labordeta, muy vinculado a esta localidad. Se
ha incorporado Juan Manuel Ramón, alcalde de Jaca, y abandonan la comitiva los
de Canfranc y Villanúa.
A la espera del tren en la estación de Villanúa |
Tras la comida, nos dirigimos andando
hasta la estación, para no dejar pasar la ocasión y reivindicar este medio de
transporte que simbólicamente sigue funcionando, pero al que hay dar también un
fuerte impulso con el fin de que recupere su antiguo uso internacional. El
trayecto se hace hasta el apeadero de Castiello, donde nos espera una
representación de su consistorio, encabezada por su alcalde Álvaro Salesa, que
junto con el de Jaca, acompañan a la comitiva ya hasta el final de la etapa, pasando
por el camino habitual. Río Ijuez, Torrijos, Charlé, donde hacemos un alto para
refrescarnos del calor reinante, ermita de San Cristóbal con el viejo puente
que salva el barranco de Rapitán, y entrada a Jaca por el Árbol de la Salud, donde estaba en la
antigüedad la iglesia de San Esteban y el hospital de San Marcos, de vocación
leprosera.
Pasando el río Ijuez |
De tiro a la catedral, donde se
da por terminada esta calurosa jornada, en la que se ha podido disfrutar de
esta primera etapa de unos 30 km de distancia, entre el puerto de Somport y la antigua capital del reino. Una etapa con más historia que presente, plagada de puntos de interés, y que
está a la espera de ese impulso para asegurarle el futuro que merece, y que estas jornadas sientan las bases para que así sea. Para ello es necesario diseñar unos planes de actuación inmediata y una buena estrategia a medio y largo plazo.
Al paso por el camino de Mocorones |
Sábado, 9 de julio. Jaca – Santa Cilia. Siete de la mañana.
Estación de Autobuses de Jaca. Con Jesús Rivas, también de la FAM, comenzamos esta nueva jornada. Los acompañantes esta vez son miembros del
activo grupo de Andarines del Club Atletismo Jaca y del Club Pirineísta
Mayencos, de perfil más montañero, pero que siempre hay quien se integra en
estas andadas por el monte bajo. Sí, porque hoy dejamos ya los puertos y nos
dirigimos por la Balancha y la Canal de Berdún hacia el siguiente objetivo:
Puente la Reina, aunque finalmente no lo alcanzaremos debido a las altas
temperaturas.
Pasando el puente del Gas |
Catedral, Rompeolas, camino de
Mocorones, cementerio y tras un breve tramo junto a la carretera, nos metemos
de lleno en el Camino, que tras una fuerte bajada va entre huertas y el canal.
Elementos viejos que se alternan con el nuevo del puente que dará acceso a la
autopista, y que crea un gran conflicto visual. Cruzamos la carretera a la
altura del puente del Gas, para volverla a cruzar frente a la Casa del
Municionero, de donde arranca la variante GR 65.3.2, que visita los monasterios
viejo y nuevo de San Juan de la Peña, y Santa Cruz de la Serós, incorporándose
a éste a la altura de la carretera de Binacua, por donde pasaremos más
adelante.
Paco Mondano |
Nuestro paso discurre ahora por
una gran chopera, para ir a dar a las Batiellas, un antiguo complejo castrense,
hoy en desuso. Volvemos a cruzar la carretera para discurrir por el Boalar, frente
al IFA (Instituto de Formación Agroambiental), que nos lleva al barranco de
Atarés, que también tenemos que cruzar. Pronto nos enfrentamos a la calzada de
la subida al paco Mondano, que tras un tramo más amable nos asoma a un mirador,
desde el que se divisa ya nuestro objetivo en esa Canal de Berdún. Bajamos a
Esculabolsas, donde hacemos otra breve parada, donde se incorpora Luis Masgrau,
presidente de la FAM. Al proseguir la marcha, el camino nos lleva a la
carretera de Binacua, donde nos encontramos esa señal del sendero de la
variante que viene de los monasterios, antes mencionada. En las proximidades de
la carretera general, nuevo encuentro con los medios.
En los jardines de la iglesia |
Estamos ya frente a Santa Cilia,
la que alcanzamos tras pasar otra vez la carretera. Allí tomamos contacto con
los Andarines del CA Jaca y parte de la comitiva. Los primeros se vuelven a su
lugar de origen, y todos ya agrupados nos dirigimos al parque de El Salzar atraídos
por la sombra. Una visita guiada por la población y algunos de sus interesantes
puntos de atención, como por ejemplo la iglesia de San Salvador y la Casa
Palacio próxima. Esta casa, llamada también de La Cadena o Palacio del Clavero
(de llave) de San Juan de la Peña que, datada en el siglo XVI, albergaba una de
las instituciones más importantes del monasterio en sus tiempos, la del
encargado de las haciendas y de la gestión económica del cenobio, estando
habitada intermitentemente por los frailes del monasterio. Visitamos también el
albergue del peregrino, sencillo pero utilitario, con su sala multiusos en la
última planta.
Acudimos al nuevo pabellón del
parque para echar un bocado entre amigos, gentileza de Manuel Máñez, alcalde de Santa Cilia. Al final, el consejero nos da la
sorpresa de que premia con una medalla a tres chicos que habían soportado como
mayores los rigores de la jornada. Bueno, y poco más. Tomamos el microbús que
viene a nuestro encuentro y para Jaca, tras dos días intensos en los que hemos
puesto nuestro granito de arena por el territorio. Mucho camino queda, pero
estamos en él, que es lo importante.
Las fotos, en: https://picasaweb.google.com/chematapia/6305573834992990465
No hay comentarios:
Publicar un comentario